01/11/2011
LUGAR: REDACCIÓN DE MARCA
HORA: 0:00
Aquel día había sido espantoso para Andrés ("Cualquier día lo era" pensó el) pero ese día en especial lo había pasado muy mal, había tenido que soportar las criticas por parte de los diarios deportistas catalanes hacia el Real Madrid por su partido ante el Real. "¿Se puede ser más hipócrita que esos diarios?" Pensó. Y, para colmo, se tenía que quedar en el curro toda la noche hasta que terminase la redacción que le mando hacer su jefe. En el edificio tan solo había dos personas mas con el, los dos guardas de noche, puesto que los demás se habían ido a casa porque ese día era Halloween, una fiesta que no entendía porque se celebraba ¿Por que la gente celebraba una fiesta tan macabra? Nunca lo entendería y es por eso que nunca la celebraría. Tras tanto tiempo pensando en eso terminó su redacción, "¡Que bien!" pensó, tan solo era la 1:30, ahora podría irse a casa a descansar hasta las 8:00 que era cuando entraba a trabajar de nuevo, recogió todo, apagó el ordenador y estaba apunto de irse cuando oyó un ruido, se giró y vio que Manuel (el guarda que estaba con el) no estaba, eso le extraño puesto que siempre estaba por allí deambulando, empezó a mirar a ver si es que estaba de broma, entonces volvió a oír el ruido, venía del despacho de su hermano. Sin pensarlo dos veces abrió la puerta y vio que la silla de su hermano estaba mirando hacia la ventana y había alguien sentado en la silla.-Manuel, ¿Eres tu? Te la puedes cargar si te pilla mi hermano.
El que estaba sentado en la silla no hizo indicios de haberle escuchado porque no se movió nada.
-Manuel, deja de hacer el tonto anda.
En ese momento la silla se giró y Andrés vio algo espeluznante. Manuel tenía la cara demacrada, los ojos los tenia muertos y una parte de su cabeza estaba abierta y además llevaba una camiseta del Barça puesta.
-Cerebro- dijo Manuel mientras se levantaba de la silla e iba a por Andrés, este último asustado cerró la puerta del despacho y salió corriendo, cuando salió del edificio vio que las calles estaban desiertas, los coches estaban en medio de la carretera, las tiendas tenían las cristaleras rotas y las calles olían a muerto. Sin saber porque estaba todo allí salió corriendo hacia su casa pero al girar la esquina vio a una marabunta de zombies con la camiseta del Barça gritando lo mismo que gritaba Manuel, "Cerebro"
Andrés salio corriendo por donde había venido pero vio que no tenia escapatoria ni de frente, ni a los lados, estaba perdido, iba a morir y cerró los ojos para no ver el festín que se iban a pegar con el. Pero, justo en el instante en el que el ya aceptaba su muerte alguien abrió el portal que estaba detrás suyo y le metió dentro del edificio, el hombre tenia un acento raro y creía que era otro zombie pero el tío con acento raro (el caso es que le sonaba) le dijo que no tenia de que preocuparse, que el no era un zombie, asustado le hizo caso ya que no tenía otra alternativa y le siguió escaleras arriba a oscuras. Entro en lo que parecía un piso (que también estaba a oscuras) y, tras de si, el hombre que tenia un acento raro pero conocido cerró la puerta y encendió la luz, lo que vio cuando se encendieron le dejó alucinado, allí estaban, 22 hombres vestidos de blanco, con el escudo del Madrid en el pecho, eran los jugadores del Madrid con unas escopetas en la mano (salvo Pepe que no tenia armamento y no sabia porque), se giró y vio que el hombre que le había ayudado era Mou.
-¿Que pasa aquí? ¿Que es esto? ¿Y por que Pepe no lleva armas?
-Lo primero, haces mas preguntas que yo y segundo, mira a Pepe, ¿tu crees que con lo loco que esta necesita armas?-dijo Mou
Le miró y vio una mirada de loco, cosa que le asusto.
-Vale, ya lo he entendido.
Mou se sentó en el único sofá que había allí.
-Te explico-continuó Mou-A pasado algo que nos temíamos.
-¿El que?
Pepe le dio una colleja a Andrés.
-¿Quieres callarte y escuchar?-miró a Pepe y le dio las gracias por la colleja-Bien, como iba diciendo, a pasado lo peor que podía pasar, el mundo se ha hecho del Barça, quedan muy pocos madridistas de verdad, incluso los pseudomadridistas se han unido a ellos.
-¿Y porque quieren comernos los cerebros?
Todos se partieron de risa.
-¿Comernos el cerebro? Ves demasiadas películas, no nos lo quieren comer, los quieren para ponérselos ellos puestos que los suyos no dan para mucho.
Ahora Andrés lo entendía todo.
-¿Y que vamos a hacer? No nos podemos quedar aquí sin hacer nada.
-¡ESTO ES ESPARTA!-dijo Arbeloa.
Mou se llevo las manos a la cabeza.
-Cuanto daño te ha hecho la película 300, Arbeloa-dijo Iker.
-¿Y a este que le pasa?-dijo Andrés.
-Nada, déjalo, el pobre se ha quedado atascado en esa película-dijo Mou-Bueno, el caso es que lo único que les hace daño es la camiseta del Madrid, por eso cada uno de mis jugadores lleva su camiseta, lo malo es que el efecto tan solo dura 10 míseros segundos cuando pasas entre ellos.
-¿Y como sabéis su efecto si estáis todos aquí?
-Hemos hecho el experimento con uno y duró lo que te acabo de decir, 10 míseros segundos.
-¿Habéis mandado a una persona desconocida a suicidarse?
-Tranquilo killo-dijo Ramos-No era desconocida, era Pedro León.
-¡Ah bueno! Entonces me quedo más tranquilo-dijo Andrés-¿Y que tenéis planeado hacer?
-Lanzar un cebo y que le persigan a el hasta que podamos llegar a una cadena de TV y emitir la señal de Real Madrid TV, creo que serviría-dijo Iker.
-Ya ¿Y que serviría para distraerlo?
-¡Özil, trae la camiseta!-dijo Iker gritando.
El llegó con una camiseta antigua del Real Madrid, sabía de quien era.
-¿Y quien va a ser el cebo?-dijo Andrés, y todos le miraron a él.
"¿Porque hablaré?" Pensó Andrés mientras bajaba las escaleras con la camiseta antigua del Madrid puesta.
-En fin, tu corre y no te pares, y si por si acaso no nos volvemos a ver, tan solo decirte que...-Mou, tras decir esto, abrió el portal y empujó a Andrés a la calle-¡Corre Figo! ¡Corre!
Él salió corriendo y todos los culés zombies se giraron y empezaron a coger piedras, palos, botellas de JB, cabezas de cochinillos y muchas otras cosas que Andrés no sabia que eran pero que no le gustaría que le alcanzasen. Él salió corriendo como nunca lo había hecho, mientras que lo hacia, Mou y sus amigos salían del portal directos a la cadena de TV pero, cuando lo consiguieron ellos, ya era demasiado tarde para el, muchos culés zombies se le tiraron encima y le molieron a hostias.
Se despertó sobresaltado, estaba en la redacción de Marca, todo era una pesadilla ¡Menos mal! Se alegraba de haber vuelto al mundo real. Vio que había terminado la redacción, así que la guardó y después recogió sus cosas para irse a casa, pero justo en ese instante, apareció Álvaro por la puerta.
-¿Que haces aquí?-Le dijo Andrés.
-¿Trabajar quizás?
-¿A estas horas?
-Si, a las 12:30 de la mañana.
Andrés miró el reloj y vio que había dormido más de la cuenta.
-Bien, aquí tienes otra cosa que redactar, "Mou, el malvado"-dijo mientras hacía un gesto con la mano en el aire al decir el título. Y entonces Andrés se dio cuenta de que quería regresar al mundo de los sueños.
CONTINUARA.
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